Un grupo de investigadores del Centro de Astrobiología (CAB) descubrieron en el espacio la primera molécula “interestelar” que contiene más de tres átomos de oxígeno: el ácido carbónico. Dicho hallazgo ayudará a comprender mejor la química interestelar, ya que dicha molécula es aquella que pudo jugar un papel esencial para el origen de los seres vivos en el universo. Científicos hallan
De acuerdo con las principales teorías que explican el origen de la vida, una química prebiótica se desarrolló durante las primeras fases de la formación de nuestro planeta, y se cree que una parte fundamental de los ingredientes prebióticos pudo llegar al planeta Tierra sobre meteoritos formados en el Sistema Solar.
El entender cuáles moléculas prebióticas existen en el medio interestelar es primordial para entender cómo es que pudo haber surgido la vida en nuestro planeta. En los últimos años, surgieron teorías que sugerían la presencia de ácido carbónico en diversos objetos del sistema solar, como en las lunas de Júpiter, el polo norte de Mercurio y en la atmósfera de Marte, pero hasta hoy se confirmó su existencia extraterrestre.
El CAB en España demostró la presencia de la molécula en el espacio Científicos hallan
El equipo que hizo el descubrimiento es liderado por Miguel Sanz-Novo, en el Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA), quienes afirmaron que es la primera molécula interestelar que contiene tres átomos de oxígeno en su estructura y también el tercer ácido carboxílico detectado en el medio interestelar hasta el momento,
El primero fue el ácido fórmico identificado en el ISM y descubierto en 1971, para posteriormente hallar la presencia de ácido acético en 1997.

De acuerdo con Víctor M. Rivilla, investigador del CAB y coautor del artículo: “Nuestras observaciones nos han permitido saber que el ácido carbónico, que hasta ahora había permanecido invisible a nuestros ojos, es relativamente abundante en el espacio, lo que le convierte en una pieza esencial para entender la química interestelar del carbono y del oxígeno, dos de los elementos químicos fundamentales en cualquier proceso prebiótico”.
Rivilla concluyó que “este resultado confirma que la senda que hemos escogido es la adecuada para buscar y detectar más moléculas que sospechamos fueron claves para la aparición de la vida en nuestro planeta”.
(Con información de La Verdad)