El Día de Muertos es una tradición imperdible para cualquiera que se encuentre en México el 1 y 2 de noviembre. No es mentira cuando alguien dice que los mexicanos no le tememos a la muerte, sino que la adoramos y celebramos. Pero no es que riamos ante el hecho de que alguien pierda la vida, sino que ambos días celebramos la vida de los que ya se fueron. Películas sobre
Desde la época prehispánica, la muerte es un elemento central en la cultura, ya que una vez que nacemos no hay nada certero, salvo la muerte. De ahí proviene el mito del Mictlán, que es un pasaje por el que todos pasamos una vez que nuestra vida se consume y hay que superar varias pruebas guiados por un xoloitzcuintle. Sin embargo, ésta ha ido cambiando con el paso del tiempo, pero siempre coincide en que después de la muerte, hay un lugar en el que, eventualmente, nos reuniremos con aquellos que partieron o que partirán antes y después de nosotros. Películas sobre
Así, en el afán de hacer menos dolorosa una pérdida seguimos “celebrando” a través de una ofrenda en la que se colocan elementos básicos como velas, agua y flores, entre otros, y todo aquello que a los difuntos les gustaba, especialmente alimentos y bebidas, u objetos personales. Pero el Día de Muertos no se queda en el altar, sino que se extiende a una fiesta —o casi— en la que hay comida, flores, colores y canciones. Tal vez lo hacemos para estar en paz con la muerte, porque en el fondo, nadie quiere despedirse de este plano.
Sea como sea, los cineastas saben que el Día de Muertos es una celebración única, que vale la pena plasmar en su trabajo para entenderlo de diferente manera y claro, mantener viva la tradición.
Macario Películas sobre
Roberto Gavaldón, 1960
Empezamos la selección con la película de Día de Muertos por excelencia: Macario. Ésta fue la primera película mexicana nominada al Oscar en la terna de “Mejor película extranjera” y cuenta la historia de un talador que vive en Taxco, Guerrero, con su esposa e hijos en la pobreza extrema. Él anhela comer un guajolote solito, sin compartir un solo bocado pues al desarrollarse en el Día de Muertos, empieza a temer por no haber disfrutado la vida como le hubiera gustado. Cuando su esposa consigue un guajolote para Macario, éste se ve tentado a compartirlo con Dios, con el diablo y con la muerte, pero sólo a ésta última le da un poco y ella (él), en agradecimiento, le concede un don muy especial.
Coco Películas sobre
Lee Unkrich, 2017
No podemos dejar fuera esta película de Pixar que, sin duda, hizo que todo el mundo se interesara en México y sus tradiciones más arraigadas y sagradas como el Día de Muertos. Coco cuenta la historia de un niño mexicano llamado Miguel, quien es amante de la música y muy fan de Ernesto de la Cruz, un respetado artista en el país. Sin embargo, la familia detesta la música, pues el tatarabuelo huyó por perseguir su sueño de ser un músico importante. Pero, justo en la celebración de los difuntos, Miguel llega por error al mundo de los muertos en donde se entera de la verdad respecto a su familia, misma que irá a contarle a todos los integrantes, en especial a Coco, su bisabuela, quien es la verdadera protagonista de la historia. Películas sobre
El libro de la vida
Jorge R. Gutiérrez, 2014
Ésta es una historia de amor y de recuerdos que fue nominada a los Globos de Oro. Cinco pequeñitos recorren un museo en el que les muestran una habitación secreta en la que se encuentra “el libro de la vida”, que cuenta la historia de un triángulo amoroso entre Manolo, Joaquín y María. Ellos eran tres niños del pueblo de San Ángel, observados por La Catrina (gobernante de la Tierra de los Recordados) y Xibalba (gobernante de la Tierra de los Olvidados) y apuestan por saber quién de los niños se casaría con María. Xibalba hace trampa y luego de varios altercados entre ellos y de varias idas y venidas a las tierras (de los Recordados, de los Olvidados y la vida real) los chicos entienden la importancia de aprovechar cada día, de celebrar a los que se fueron antes y de hacer lo mejor posible para tener una vida agradable.
¡Que viva México!
Sergei Eisenstein, 1932
Cuando el cineasta soviético vio los grabados de José Guadalupe Posada se interesó en México casi obsesivamente. Así, tras algunos acuerdos con productores estadounidenses llegó al país a filmarlo por dos años, hasta que cancelaron su documental. Del material surgieron varios cortes, entre ellos uno dedicado al Día de Muertos. En él, Sergei Eisenstein muestra su propia visión de la fecha, en la que, justamente, representa la festividad como un momento de reflexión casi sagrado, pero también de fiesta en el que cada persona recuerda a sus seres queridos comiendo y bebiendo alrededor de las tumbas con mucho respeto, actuando como si estuvieran ahí y reviviendo todo aquello que en vida disfrutaron juntos. Así como puede ser una ceremonia solemne, es un día para bailar y pasarla bonito.
Calacán
Luis Kelly, 1987
Este filme es una combinación entre títeres de gran tamaño y actores reales, lo que la hace apta para toda la familia, aunque su estética es un tanto tétrica. Filmada en la Ciudad de México y en Michoacán, la historia gira en torno a Ernesto, un chico de ocho años que ama el Día de Muertos, así que está muy emocionado por la fecha. En sus andanzas se da cuenta de que una empresa busca sustituir las calaveritas de azúcar por calabazas de plástico, por lo que se dedica a destruir los planes. Esto es un claro mensaje político a favor de preservar las tradiciones nacionales y de evitar la incorporación extranjera a fechas tan importantes. Películas sobre
Los hijos de la guayaba (Día de difuntos)
Luis Alcoriza, 1988
El que fuera autor de varios de los guiones más importantes de Luis Buñuel como Los olvidados, El ángel exterminador y El gran calavera, también realizó trabajos como director. Alcoriza hizo casi al final de sus días este filme que se desarrolla durante el Día de Muertos. El licenciado Talamantes va al panteón como cada año a visitar un familiar para, aparentemente, sanar culpas pasadas. Ahí, conoce a otros visitantes como un zapatero, un albañil, un poeta y más que, al igual que él, acuden para honrar a sus familiares, pero también a ganarse un lugar en el paraíso luego de un trato no tan agradable para con ellos.
La leyenda de la Nahuala
Ricardo Araniz, 2007
Aunque es la primera de una franquicia que incluye películas como La leyenda del charro negro o La leyenda de las momias de Guanajuato, en esta historia podemos ver a Leo San Juan, un chico de 10 años que vive en Puebla de los Ángeles con su abuelita y su hermano Nando en la Nueva España de 1807. Como todos los hermanos, Nando y Leo se hacen bromas y el primero asusta a todos con historias sobre la Nahuala, una mujer que habita en una casa abandonada que tiene que comerse a tres niños para apoderarse de la ciudad, hasta ese momento, según Nando, llevaba dos y estaba en búsqueda del último. Pero, por contar historias de miedo a otros niños, desaparece en pleno Día de Muertos y Leo emprende una aventura para encontrar a su hermano y derrotar a la Nahuala.
Bajo el volcán
John Houston, 1984
Geoffrey Firmin es un diplomático inglés que se encuentra en Cuernavaca, Morelos durante la celebración del Día de Muertos. Él, como casi cualquier turista, se asombra de las fiestas en torno a la fecha. En 1938 el mundo está a punto de sumergirse en la Segunda Guerra Mundial, y el hombre, entre su soledad y su depresión, es alcohólico y no quiere seguir viviendo. Aún con ello se da una segunda oportunidad buscando a su esposa en las faldas del Popocatépetl, lugar que podría ser su última morada. Cabe señalar que, si bien es una cinta casi norteamericana, es la última en la que Emilio “El indio” Fernández participó, lo que la convierte en una película de culto dentro de la filmografía del también director.
“¡Qué maldita, qué cabrona es la vida que no nos mata a nosotros sino a los que amamos!”
— Carlos Fuentes.
(Con información de admagazine)