Los primeros resultados de la autopsia del cantante británico Liam Payne, fallecido el pasado 17 de octubre tras caer del tercer piso de un hotel en Buenos Aires, han revelado la presencia de múltiples sustancias en su organismo. Según el sitio de noticias de celebridades TMZ, las pruebas de toxicología indicaron que Payne había consumido una mezcla de drogas, incluyendo éxtasis, crack, ketamina y una sustancia conocida como “cocaína rosa”. También se detectó la presencia de “cristal”, una versión de metanfetamina común en Argentina.
La policía argentina, que investiga el caso, encontró en la habitación del hotel una botella de alcohol, además de medicamentos recetados para la ansiedad. Según las fuentes citadas por TMZ, estos hallazgos podrían respaldar la hipótesis de que las drogas jugaron un papel importante en su trágica muerte, y se investiga si pudo haber sido un suicidio.
Las imágenes obtenidas por el medio revelan el estado de la habitación donde ocurrió el incidente, mostrando una pantalla de televisión rota, polvo blanco sobre una mesa y objetos relacionados con el consumo de drogas. La noticia ha generado conmoción, especialmente en Reino Unido, donde el exmiembro de One Direction era una figura muy querida.
El padre de Payne, Geoff Payne, viajó al día siguiente de la muerte de su hijo a Argentina para gestionar la repatriación del cuerpo, un proceso que podría tomar entre diez y quince días. Mientras tanto, sus fanáticos alrededor del mundo continúan expresando su dolor y tristeza en redes sociales, haciendo de la noticia un tema viral. Las investigaciones policiales siguen abiertas para determinar con mayor precisión las circunstancias del fallecimiento.
Para seguir leyendo: Novia de Liam Payne se pronuncia tras su muerte: “he estado completamente perdida”