El lanzamiento de ‘The Life of a Showgirl’, el más reciente álbum de Taylor Swift, ha causado un enorme impacto en la industria musical. Mientras rompe récords de ventas y domina las plataformas de streaming, el disco también ha generado una ola de opiniones encontradas entre la crítica y sus seguidores.
Por un lado, medios como Rolling Stone celebraron el material con una calificación perfecta de cinco estrellas, describiéndolo como una nueva cima artística y personal para la cantante. The New York Times coincidió en que el álbum es “pegadizo y sustancial”, considerándolo un cierre dorado en la carrera de Swift.
Sin embargo, otros medios adoptaron posturas mucho más críticas. Slate lo calificó como “una obra maestra del cringe”, mientras que The Guardian lo describió como “brillante y aburrido”, asegurando que, aunque no es un mal disco, no alcanza el nivel esperado de la artista estadounidense.
La división también se ha reflejado dentro de la comunidad swiftie, donde algunos celebran el regreso de Swift al pop más accesible, mientras otros expresan su decepción por lo que perciben como letras superficiales y un tono artificial. En redes sociales, abundan los comentarios que comparan el estilo del disco con “música hecha por inteligencia artificial” o que critican la aparente falta de profundidad de temas como Actually Romantic o WOODS.
El primero se interpretó como una respuesta a la canción Sympathy is a Knife de Charli XCX, y ha generado debate por su tono irónico frente a las comparaciones entre artistas femeninas. En tanto, WOODS, supuestamente inspirada en su relación con Travis Kelce, ha sido señalada por el tratamiento forzado de la sexualidad, un tema poco común en la discografía de Swift.
Para seguir leyendo: Autoridades identifican a presuntos responsables de amenazas de bomba en la UNAM
Algunos críticos sostienen que el problema de fondo radica en la imagen tradicional que la cantante ha mantenido a lo largo de su carrera y que ahora parece chocar con las expectativas del público contemporáneo. En plataformas como TikTok, los usuarios contrastan su propuesta con la de nuevas estrellas pop como Sabrina Carpenter o Chappell Roan, quienes abordan temas de identidad y empoderamiento con mayor libertad.
Aun con las críticas, el éxito comercial de ‘The Life of a Showgirl’ confirma que Taylor Swift sigue siendo una figura dominante en la música global, capaz de provocar admiración, debate y controversia a partes iguales.







