Cancún, 22 de septiembre 2023. – El caso de venganza protagonizado por Ricardo en contra de Elena, de 27 años, que terminó en la destrucción y robo de objetos valiosos en su departamento, por la supuesta infidelidad cometida por la joven, ha captado la atención de los cibernautas en redes sociales, dividiendo opiniones.
La psicóloga Alim Yam ha compartido un análisis psicológico sobre el comportamiento de ambos involucrados que han sido juzgados en redes sociales bajo criterios machistas y sin posturas objetivas ante el contexto social que se vive en el país.
“Aquí la cuestion es que desde una perspectiva de género, la acusada va a ser ella por el hecho de ser mujer. Pero lo importante es que este es un claro ejemplo de la violencia simbólica en donde una persona trata de ejercer un poder o se hace valer de un poder sobre otra persona. Pero lo que sí es que no solo fue víctima de violencia de género, sino también patrimonial, económica e intrafamiliar”.
Explicó que ante las declaraciones de la joven sobre el beso que detonó toda esta situación, no puede ser considerado como infidelidad sin antes conocer el trasfondo psicoemocional que se vivía entre la pareja. Pero por la reacción que Ricardo tuvo en contra de las pertenencias de la joven, habla de un problema psicológico.
“En realidad, la culpable no es ella, sino él, tan solo por la forma de actuar, es un agresor, es prácticamente un posible violentador en potencia y desde luego que no tiene ningún tipo de control de impulsos. Si lo vemos desde un punto de vista psicológico, la pareja que ella tenía no aportaba ni emocionalmente, ni económicamente, lo mismo. No quiere decir que ella esté en su total libertad porque su pareja no le daba dinero, sino que simplemente no satisfacía todas las necesidades que una pareja conlleva”.
En cuanto a la reacción en redes sociales, la psicóloga destaca que es el claro ejemplo del comportamiento misógino y machista que aún se sigue percibiendo en el país, no solo en los mismos hombres, sino en alguna de las mujeres.
“Claro que es una situación sexista y misógina. ¿cómo hubieran reaccionado si el infiel hubiera sido él y ella le hubiera roto todas sus pertenencias? Pues se le habría tachado de loca o histérica, pero como ella fue la ‘infiel’ todos se van en contra de ella. Yo creo que a la sociedad le hace falta mucha perspectiva de género y desde luego mucha sensibilización ante cualquier situación”.