Los bancos centrales de las mayores economías del mundo anunciaron este domingo en la noche un esfuerzo coordinado para mantener el flujo de dólares en el sistema financiero global tras el sobresalto experimentado por la banca regional en Estados Unidos y la segunda entidad bancaria suiza.
La Reserva Federal, el Banco de Inglaterra, el Banco de Canadá, el Banco de Japón, el Banco Central Europeo y el Banco Nacional Suizo dieron a conocer a través de un comunicado conjunto “una acción coordinada para mejorar la provisión de liquidez a través de la línea de intercambio en dólares estadounidenses”.
Las corridas bancarias experimentadas en los últimos días en algunos bancos específicos ha generado el temor global de que el sistema financiero deje de dar crédito ante la falta de liquidez, por lo que el anuncio conjunto de este domingo busca calmar cualquier nuevo sobresalto.
La declaración de este domingo también se produce pocas horas después de que el gigante bancario suizo UBS anunciara la compra de su atribulado rival Credit Suisse por casi 3,250 millones de dólares en un acuerdo orquestado por los reguladores para evitar más turbulencias que sacudan el mercado en el sistema bancario mundial.
Las autoridades suizas presionaron para que UBS se hiciera cargo de su rival más pequeño después de que un plan para que Credit Suisse tomara prestado hasta 50,000 millones de francos (54,000 millones de dólares) no logró tranquilizar a los inversores ni a los clientes de esa entidad bancaria europea.
Movida en EEUU para evitar mayores turbulencias de la banca regional
El temor de muchos bancos a verse con escasez de efectivo llevó a la Reserva Federal (Fed) a otorgar solo la semana pasada préstamos por unos 300,000 millones de dólares, según datos del banco central.
Casi la mitad del dinero (143,000 millones de dólares) se destinó a las sociedades creadas tras los colapsos la semana pasada del Silicon Valley Bank y Signature Bank, lo que provocó una alarma generalizada en los mercados financieros.
La Fed no identificó a los bancos que recibieron la otra mitad de la financiación ni dijo cuántos de ellos lo hicieron, pero la cifra da una idea de la escala de la asistencia que ha recibido el sector bancario en la última semana.
Las sociedades creadas para hacerse cargo de los dos bancos en quiebra por la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC) usaron el dinero que tomaron de la Fed para pagar a los titulares de depósitos no asegurados. Además, emitieron bonos como garantía.
La FDIC es la garante del pago de los préstamos, dijo la Fed.
El resto del dinero fue prestado a bancos que buscaban obtener efectivo, probablemente, al menos en parte, para pagar a los titulares de depósitos que intentaron retirar su dinero por miedo a perderlo.
Biden quiere sanciones a banqueros
El presidente Joe Biden pidió el pasado viernes al Congreso que permita a los reguladores imponer sanciones más duras a los ejecutivos de los bancos en quiebra, incluida la recuperación de compensaciones a altos ejecutivos y facilitar la prohibición de trabajar en la industria.
Biden quiere que la FDIC pueda forzar la devolución de la compensación pagada a los ejecutivos en una gama más amplia de bancos en caso de quiebra y reducir el umbral para que el regulador imponga multas y prohíba a los ejecutivos trabajar en otro banco.
También hizo un llamado al Congreso para que le otorgue a la FDIC esos poderes después de que las quiebras de Silicon Valley Bank y Signature Bank conmocionaron la industria bancaria mundial.
“Fortalecer la rendición de cuentas es un elemento disuasorio importante para evitar la mala gestión en el futuro”, dijo Biden en un comunicado. “El Congreso debe actuar para imponer sanciones más duras a los altos ejecutivos bancarios cuya mala gestión contribuyó a la quiebra de sus instituciones”, agregó el mandatario estadounidense.
(Con información de The Associated Press)